Con el equipo en descenso, Iglesias fue sustituido por José María Ramos, quien recuperó a los apartados Francisco Brito y Álvaro González, y logró el decimotercer puesto. El nuevo técnico finalizó en el duodécimo puesto un curso en el que se unieron al plantel algunos como Guina Gallon, Ricardo Ortega Mínguez, Luis Delgado Vargas o José María Noriega, así como Rommel Fernández. Paco Gento, presidente de honor del club desde 2015 y el que más tiempo ostentó la capitanía del primer equipo al hacerlo durante nueve temporadas, o el del vasco José María Castell, arquitecto del Estadio de Chamartín, como el jugador más joven en ser capitán con apenas dieciocho años. José María Negrillo una vez cumplida la jornada catorce. ↑ Ramos, Juan José (15 de noviembre de 2020). «Fran Fernández: El pasajero 33». El Día. A su vez, también volvió Juan Díaz, que a causa de lesiones solo pudo disputar cuatro partidos y a falta de doce jornadas para el cierre abandonó la plantilla. Dos meses sin conocer la derrota hicieron que alcanzara la segunda posición, pero algunas derrotas en el tramo final lo dejaron el sexto clasificado.
En la consecución del campeonato doméstico quedó reflejada una de las patentes del equipo blanco: no rendirse hasta el pitido final del encuentro y sumó diecisiete puntos y siete victorias desde el minuto ochenta de partido. En la Copa del Rey cayó en la segunda ronda en manos del Recreativo de Huelva, no sin antes vencer a Las Palmas por un global de 4-3 en la primera. Copa del Generalísimo cayó en la quinta ronda ante el Betis, aunque remontó un 3-0 contra el Córdoba en la eliminatoria anterior. A pesar de entrar cuando estaba en descenso, nueve partidos sin perder hicieron que ascendiera hasta la sexta posición, a cinco puntos del ascenso; por otra parte, se retiraron Alberto Molina, al inicio, y Justo Gilberto, al final. La Policía parecía indiferente, aunque creo que finalmente sí fue detenido. Para la campaña 1999-2000 regresó la franja azul, aunque menos ancha que la de la década de 1960 y para incluir publicidad; no regresó hasta la 2003-04 y de ahí se mantuvo hasta la 2005-06, ya que a partir de la siguiente retornó al pantalón azul y camiseta blanca. A finales de la década los éxitos de la sección de baloncesto acompañaron a los del fútbol, y el equipo se desquitó por fin frente al complicado rival serbio.
Según avanzó el diario alemán ‘Bild’ este lunes, el Borussia Monchengladbach ha elegido al tolosarra para sustituir en su banquillo a Marco Rose, que abandonará dicho club el próximo verano para hacerse cargo del Borussia Dortmund. Cabildo de Tenerife tuvo que comprar el estadio para «garantizar la supervivencia económica» de la entidad, pues tenía una deuda superior a las treinta millones de pesetas. Por otra parte, se produjo el regreso de Barrios doce años después, para conformar una dupla goleadora con Chalo, quien firmó veinte dianas. Por otro lado, se vendió a Barrios al Granada y respecto a la presidencia, Valenzuela dimitió y José González Carrillo le relevó. Entonces, Ñito ejerció como técnico interino en cuatro partidos, en los que no consiguió ganar, hasta el regreso de Monero, al tiempo que José López Gómez salió elegido presidente. De igual manera, Danny Bergara y José Juan, que regresó de Las Palmas y firmó catorce goles, se unieron al bloque del ascenso. Copa del Rey llegó hasta los octavos de final. Mucho peor de lo que yo viví, que era ya el tramo final de la pesadilla vivida por los aficionados españoles y también ingleses. En ello tuvieron que ver tanto Lasaosa como David Amaral, ya que marcaron veintitrés y quince dianas, respectivamente.
En la sesión 1991-92 se fichó a Pizzi (que hizo quince goles), Óscar Dertycia, Sebastián Cruzado (Chano) y Antonio Mata, y a mediados de abril y con el equipo en el decimosexto puesto, se cambió a Solari por Jorge Valdano. Tras el descenso a Tercera División, de cara a la sesión 1968-69 se produjeron cambios como el color de la indumentaria -pantalón blanco y camiseta azul- o el nombre, pasándose a llamar «Tenerife Atlético Club». Un casillero de invicto como local, de diecisiete triunfos, dos empates y tres goles encajados, ayudó a alcanzar la primera plaza en la sesión 1970-71. Pero esta vez con otras reglas, pues la categoría pasó de tener ocho grupos a cuatro, y a pesar de acabar la primera vuelta en la octava posición. Riera solo estuvo al mando en dos partidos, pues se le sustituyó por Ramón Cobo, y este a su vez se le cambió por Santiago Villar. Este consiguió encadenar, ya con Molina recuperado, doce triunfos consecutivos en casa que sirvieron para lograr la quinta plaza.